Thursday, April 28, 2011

En el Centenario de Mahler: la Segunda Sinfonía, Resurrección


La Sinfonía 1, Titán, no fue muy exitosa en su estreno debido a que los húngaros estaban evitando el proceso de germanización que los austríacos estaban llevando a cabo en su vasto imperio; por lo tanto, lo invitaron para dirigir obra húngara, no tanto alemana.

Debido a lo anterior, Mahler se sintió fuera de lugar (y de apoyo) en Budapest. Incluso, hasta montó versiones húngaras de las óperas de Wagner, tales como Las Valkirias o El Oro del Rin.

En 1889, mientras buscaba trabajo (y un espacio para presumir su Sinfonía 1), comenzó el primer movimiento de la Sinfonía 2. Al igual que la anterior, inició con la idea de componer un poema sinfónico, esta vez de un solo movimiento, su tema fueron los Ritos Fúnebres, como inicialmente les llamó (Totenfeier).

Es muy posible que los recientes fallecimientos de su padre, su madre y su hermana durante 1889 encauzaran su obra hacia Ritos Fúnebres.

En MAY91, dejó finalmente Budapest por una posición mucho mejor para él (y para todos nosotros) en Hamburgo. Fue durante este período (Leipzig-Budapest-Hamburgo) que se comenzó a gestar su composición para la colección de canciones El Cuerno Mágico de Juventud, que influenciaría sus siguientes Sinfonías (2, 3 & 4), conocidas popularmente como las Sinfonías Wünderhorn.

En Hamburgo, le reportó a uno de los más famosos directores de orquesta de ese entonces, Hans von Bülow, quien le pidió que le interpretara en el piano sus Ritos Fúnebres, la respuesta de Bülow fue interesante: “la distancia entre esta obra y una sinfonía es la misma que hay entre la Cabalgata de las Valkirias y cualesquiera de las sinfonías de Haydn”. Entre halago y rechazo por parte de su jefe, la obra no fue presentada.

Durante la segunda mitad de 1891, su fama comenzó a crecer aún más al preparar las óperas wagnerianas de Tannhäuser, Sigfrido & Tristán e Isolda, con un éxito inusitado hasta ese entonces.

Para el año siguiente (19ENE92), presentó la premier de Eugenio Onegin, de Tchaikovsky, en presencia de su autor, quien quedaría maravillado con el joven talento y lo describiría como un genio en la batuta.

Para el verano de 1892, visitaría por única ocasión en su vida Inglaterra, en una gira operística por Londres, donde el futuro compositor Ralph Vaughan Williams comentaría años después que no pudo dormir durante dos noches seguidas después de escuchar a Mahler. Sería su última gira veraniega, porque dedicaría todo su esfuerzo para componer durante los siguientes veranos.

Por fin, contando con la fama muy crecida, el 27OCT93 presentaría nuevamente su Sinfonía 1, ahora sí, con un éxito impresionante.

El año siguiente (1894) fue decisivo para la Sinfonía 2, dada la muerte de Bülow; por un lado, ocuparía su puesto en Hamburgo; por otro lado, el escuchar una adaptación musical a la Oda de la Resurrección (del poeta alemán Friedrich Klopstock) ejecutado por un coro de niños durante el velorio, lo cual le dio la idea para componer una sinfonía, utilizando ese tema precisamente.

Primeramente tomó sus Ritos Fúnebres y los convirtió en el primer movimiento, posteriormente incluiría el resto de los movimientos, algunos de ellos (tercero y cuarto) a partir de El Mágico Cuerno de Juventud, quedando la siguiente estructura:

I.    Ritos Fúnebres (allegro maestoso, con expresión muy seria y solemne)
II.    Muy Lentamente (andante moderato)
III.    Movimiento que fluye Tranquilo (scherzo)
IV.    Primordial (muy solemne, pero sencillo)
V.    En tiempo de Scherzos (scherzo)

A pesar de que no fue publicado oficialmente por Mahler, la obra incluye un programa narrativo, el cual se lee antes de cada interpretación:
el primer movimiento representa un cortejo fúnebre y hace preguntas como ¿Hay vida después de la muerte?, el segundo movimiento es un recuerdo de tiempos felices en la vida del difunto, el tercer movimiento representa una visión de la vida como una actividad sin sentido, el cuarto movimiento es el deseo de liberación de la vida sin sentido y el quinto movimiento - después de un regreso de las dudas del tercer movimiento y las preguntas de la primera - termina con una ferviente esperanza de renovación eterna, trascendente”.

El primer movimiento está escrito en Do menor, aunque pasa por una serie de diferentes estados de ánimo, a menudo se asemejan a una marcha fúnebre, pero un tanto violenta. La forma de este movimiento es aún objeto de debate. Sin duda alguna, se trata de una sonata extendida. El primer tema lo inicia el bajo, mientras que el canto fúnebre es interpretado por los instrumentos de viento. El segundo tema se introduce en Mi mayor, por los violines; enseguida,se retoma Do, pero ahora mayor. El final de este movimiento cierra con un tema en las trompetas, cayendo en Mi bemol mayor.

Una vez que concluye el primer movimiento, se hacía una pausa de cinco minutos antes de comenzar el segundo movimiento, como momento de reflexión, aunque ya es raro el observarla en la actualidad.

El segundo movimiento es realmente un Ländler, en la tonalidad de La bemol mayor, el cual lleva dos secciones contrastantes, siendo un poco más oscuro. Este movimiento es lento en sí mismo, se trata de un recuerdo de los tiempos felices en la vida de la persona fallecida.

El tercer movimiento es un Scherzo en Do menor. Se abre con dos golpes fuertes, seguido por dos golpes más suaves, para seguir trazos más suaves que proporcionan el ritmo de este movimiento (recordando un poco a la música judía). El final del movimiento es su parte más profunda, Mahler la mencionó alguna vez como un grito a la muerte. Básicamente, este movimiento es la canción El Sermón a los Peces de San Antonio de Padua.

El cuarto movimiento es otra canción perteneciente a la misma colección que el anterior movimiento, llamada Primordial, cantada por una contralto, que sirve como una introducción al último movimiento (recurso utilizado por Beethoven en su famosísima Novena Sinfonía).

El quinto movimiento es por mucho el más largo de la Sinfonía 2, durando poco más de media hora. Se divide en dos grandes partes, la segunda se distingue tan pronto comienza con el coro.

La primera parte es instrumental, en la tonalidad de Fa menor, con una gran variedad de estados de ánimo (en cierta forma, resume los movimientos anteriores).

La segunda parte contiene varios temas, comenzando en Si bemol menor. El primero aborda el Dies Irae (tema del primer movimiento), para introducir la resurrección, tema que el coro canta a través de sus primeras palabras y cerrar con una fanfarria. El segundo tema, en Do mayor, es un recitativo largo de orquesta, que ofrece la música para el solo de la contralto.

Inmediatamente sigue la sección de desarrollo, que Mahler intitularía la Marcha de los Muertos. Entre las muchas variantes que presenta, sobresalen La bemol mayor y Fa mayor. Comienza con dos redobles, que incluyen el uso de los gongs. Después de una travesía intensa, el corno francés da la llamada final para el cierre del coro (quien canta en Sol mayor).

Una anécdota interesante es que Mahler compró las campanas de una iglesia para las primeras actuaciones, en la búsqueda incansable por obtener un sonido diferente. Este evento fue el comienzo de la innovación sonora dentro de una orquesta, algo que se observaría en sus siguientes sinfonías.

Finalmente, la Sinfonía 2, Resurrección, fue presentada el 13DIC95, en el teatro de la ópera de Berlín, con un éxito absoluto. Uno de los grandes directores de orquesta del siglo XX, el entonces joven Bruno Walter, pudo atestiguar dicho evento y quedó embrujado por la composición de Mahler, a tal grado que sería su discípulo y uno de los mayores difusores de su obra en los años venideros.

Otro evento que incrementaría el morbo de la época fue el suicidio del hermano de Mahler, antes de la premier en Berlín.

La Sinfonía 2 (Resurrección), al igual que la Sinfonía 8 (Sinfonía de los Mil), son las obras más famosas y conocidas de Gustav Mahler. En particular, la Segunda Sinfonía fue la preferida del compositor.

El aumento de la tensión, trabajando hasta el clímax,
es tan enorme, que yo mismo no sé (ahora que es más),
cómo he podido llegar a escribirlo.
Gustav Mahler, sobre su Sinfonía 2.

Saludos.



2 comments:

  1. Hice una prueba interesante. Seleccioné el escrito y le ordené a la mac que me lo leyera. Es una excelente narración. Me gusta cómo la maquina obedece las órdenes del escrito, me refiero a la acentuación y puntuación, a tal punto que casi sentí que no era una maquina quien lo narraba.
    Creo que no soy quién para juzgar tú trabajo, ya que se podría decir soy hasta cierto punto, tu pupilo, pero esta última publicación es simplemente de exquisita lectura.
    Saludos.

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